El precioso pueblo de Valldemossa en Mallorca, es uno de esos lugares que parecen sacados de un cuento. Con sus calles empedradas, fachadas llenas de flores y un ambiente tranquilo que invita a perderse, este pueblo se ha convertido en una parada imprescindible para cualquiera que visite la isla. Además de su belleza única, Valldemossa destaca por su rica historia y una variada oferta cultural. Aquí se encuentra la emblemática Cartuja Real, que en su día fue hogar de figuras ilustres como Frédéric Chopin, y está rodeado por la imponente Sierra de Tramuntana, perfecta para los amantes de la naturaleza. 

Cada rincón de este pueblo desprende magia, y descubrir por qué es uno de los destinos más visitados será todo un viaje de emociones y sorpresas. ¿Listo para dejarte seducir por su encanto único? Descubre a continuación todo lo que puedes ver en Valldemossa en Mallorca

6 cosas que ver en Valldemossa en Mallorca

Para poder visitar Valldemossa de manera cómoda, es fundamental planificar tu estancia en la isla en un alojamiento bien comunicado que te permita recorrer los principales puntos de interés de la isla. Nuestros Hotels VIVA se encuentran en las exclusivas zonas de Alcúdia y Cala Mesquida, ubicaciones con playas espectaculares y que cuentan con todo tipo de servicios para cualquier viajero. En Hotels VIVA te ofrecemos unas instalaciones completamente equipadas para que no te falte de nada en tu estancia. Lo tenemos todo preparado para recibirte como te mereces. ¡Te esperamos!


 


Una vez llegues desde tu hotel a Valldemossa, te recomendamos no dejar de visitar los siguientes reclamos turísticos:

1. La Real Cartuja de Valldemossa 

Uno de los principales atractivos de Valldemossa es su imponente Real Cartuja, un antiguo monasterio cartujo con siglos de historia. Este lugar, construido inicialmente como residencia real, pasó a convertirse en monasterio en el siglo XIV y ha sido testigo de importantes eventos culturales a lo largo de los años.

Una vez dentro, podrás recorrer sus hermosos claustros, celdas y jardines. Entre los momentos más destacados de su historia está la estancia de Frédéric Chopin y George Sand durante el invierno de 1838-1839. Esta pareja de intelectuales encontró en Valldemossa un refugio idílico, algo que Sand reflejó en su famoso libro Un invierno en Mallorca. No olvides visitar el Museo de Frédéric Chopin, ubicado dentro de la Cartuja. Allí encontrarás partituras originales, cartas y el piano que perteneció al célebre compositor. Este lugar es un homenaje a la vida y obra de Chopin, y un punto imprescindible para los amantes de la música y la historia.

2. Los Jardines del Rey Juan Carlos

A los pies de la Cartuja encontrarás los Jardines de la Cartuja, también conocidos como los Jardines del Rey Juan Carlos. Estos jardines son un pequeño oasis de paz que combina perfectamente con la atmósfera tranquila de Valldemossa.
Llenos de bancos de piedra, fuentes y vegetación autóctona, los jardines ofrecen un lugar ideal para relajarse y disfrutar de las espectaculares vistas a la Serra de Tramuntana. Es un lugar perfecto para detenerse, respirar hondo y desconectar por un instante.
 

3. Paseo por las calles adoquinadas

Uno de los mayores encantos de Valldemossa es simplemente pasear por sus calles. Sus callejuelas empedradas y sus casas de piedra adornadas con macetas llenas de flores crean un escenario de postal. Mientras caminas, sentirás que estás retrocediendo en el tiempo, ya que el pueblo conserva ese aire típico de las localidades tradicionales de la Serra de Tramuntana.

Además, en las puertas de muchas casas notarás pequeños azulejos pintados que representan a Santa Catalina Thomàs, la única santa nacida en Mallorca, quien vivió en Valldemossa en el siglo XVI. Su figura es muy venerada en el pueblo, y su casa natal es otro punto de interés para los visitantes. Puedes pararte en alguna de las tiendas de productos locales, donde podrás encontrar desde artesanías hasta productos gastronómicos, como aceites de oliva y hierbas autóctonas de esta región.


 

4. La Iglesia de San Bartolomé

En pleno corazón de Valldemossa se encuentra la Iglesia de San Bartolomé, un templo que destaca tanto por su arquitectura como por su atmósfera serena. Construida en el siglo XIII y renovada en los siglos posteriores, mezcla estilos barrocos y góticos.

Su interior alberga impresionantes retablos y detalles artísticos que vale la pena admirar. Además, la iglesia está intrínsecamente ligada a la vida de Santa Catalina Thomàs, cuyo espíritu sigue muy presente en el pueblo.
 

5. Festividades y eventos locales

Si tienes la suerte de visitar Valldemossa durante alguna de sus festividades, vivirás una experiencia cultural única. Una de las fechas más importantes es la Fiesta de Santa Catalina Thomàs, que se celebra a finales de julio con procesiones, música y actividades en honor a la santa local.

Durante el verano también se celebra el Festival Chopin, un evento que reúne a pianistas de renombre internacional en un entorno incomparable como es la Cartuja. Los conciertos al aire libre en los jardines son una experiencia inolvidable para los amantes de la música clásica.


 

6. La Serra de Tramuntana

Valldemossa está situada en plena Serra de Tramuntana, declarada Patrimonio Mundial por la UNESCO como un Paisaje Cultural. Su ubicación ofrece a los visitantes la oportunidad de explorar los alrededores naturales.

Si eres aficionado al senderismo o simplemente disfrutas de las caminatas al aire libre, Valldemossa es un excelente punto de partida para rutas que atraviesan bosques y ofrecen vistas impresionantes. Entre las caminatas más populares se encuentra la ruta hacia el mirador de Sa Foradada, que regala una postal perfecta de las aguas cristalinas abrazadas por la montaña.


Valldemossa en Mallorca es, sin duda, un lugar donde la belleza se respira en cada esquina. Sus paisajes de montaña que se mezclan con el azul del cielo, su arquitectura encantadora adornada con flores y su atmósfera de paz lo convierten en un destino único que parece sacado de un sueño. Este pueblo tiene una magia especial, capaz de enamorar a todos los que lo visitan. Atrévete a descubrir este precioso pueblo mallorquín y crea recuerdos que atesorarás para siempre. Valldemossa te espera con los brazos abiertos.